Guía de Elección: ¿Aluminio, fibra de vidrio o madera? Encuentra la escalera perfecta para cada trabajo
Escaleras Arizona somos una empresa navarra abierta al mundo. Llevamos más de 50 años especializados en el diseño y fabricación de soluciones de altura, especialmente escaleras de aluminio, madera y fibra de vidrio. Son numerosas las empresas, pymes y autónomos que confían en nosotros porque uno de los valores que nos impulsan a mejorar cada día es poder ofreceros productos de la máxima calidad que os ayuden a trabajar seguros.
Hoy queremos ayudarte a identificar cuál es el material más adecuado para cada situación, aportando datos prácticos, normativa relevante y consejos poco habituales que solo un fabricante con décadas de experiencia puede ofrecerte.
Escaleras de aluminio: ligereza y versatilidad para profesionales en movimiento
Las escaleras de aluminio son el caballo de batalla de muchos profesionales. La razón es que es un material ligero, resistente y prácticamente indestructible frente al uso diario. Es perfecto para autónomos que se mueven constantemente entre obras, o para trabajos de mantenimiento. Piénsalo, una escalera de aluminio permite trasladarla sin esfuerzo, subirse y bajarse rápidamente y adaptarse a distintas alturas con facilidad.
No obstante, conviene tener en cuenta aspectos menos evidentes que pueden marcar la diferencia en tu trabajo diario. Por ejemplo, el aluminio puede calentarse al sol o volverse resbaladizo si se moja, por lo que recomendamos siempre modelos con peldaños antideslizantes o recubrimientos especiales. Además, es fundamental asegurarse de que la escalera cumpla con la normativa europea EN 131, que regula la resistencia, estabilidad y durabilidad de las escaleras portátiles. Debes saber que todas nuestras escaleras se fabrican cumpliendo estrictamente esta normativa y pasan por controles de calidad que garantizan un uso seguro incluso en entornos industriales complejos, desde astilleros hasta hangares de aerolíneas.
Otro dato poco habitual que no siempre se comenta: las escaleras de aluminio pueden combinarse con accesorios modulares, como plataformas de trabajo, ruedas o barandillas laterales, lo que las convierte en herramientas versátiles para trabajos especializados, como instalaciones o tareas de mantenimiento en altura. Si buscas movilidad sin renunciar a la seguridad, el aluminio es tu mejor aliado.

Fibra de vidrio y madera: soluciones para entornos específicos y exigencias especiales
Cuando hablamos de fibra de vidrio, estamos entrando en el terreno de la seguridad eléctrica. Profesionales como electricistas, técnicos en telecomunicaciones o instaladores de sistemas de control industrial requieren materiales que no conduzcan electricidad y reduzcan riesgos. Las escaleras de fibra de vidrio son ideales para estos casos: resistentes, ligeras y seguras frente a descargas accidentales, cumplen con la normativa EN 131 y están diseñadas para soportar condiciones exigentes sin deformarse ni perder estabilidad. Un truco que pocos mencionan: la fibra de vidrio también es excelente en ambientes húmedos o corrosivos, como fábricas de alimentos o talleres con productos químicos, donde el aluminio podría oxidarse o deteriorarse con el tiempo.
Por su parte, la madera sigue siendo la opción preferida en entornos donde la estética y la estabilidad a largo plazo son cruciales. Carpinteros, restauradores o técnicos que trabajan en museos o edificios históricos suelen optar por escaleras de madera maciza, que ofrecen resistencia, durabilidad y un aspecto elegante que no desentona con entornos tradicionales. Además, la madera tiene un tacto agradable, no conduce electricidad y, si se mantiene correctamente, puede durar décadas. Eso sí, conviene comprobar la resistencia de cada modelo y asegurarse de que esté homologado según la normativa vigente, ya que no todas las maderas y tratamientos ofrecen la misma seguridad.
En Escaleras Arizona, entendemos que no existe un único modelo que sirva para todos los casos, por eso ofrecemos una gama completa de escaleras de aluminio, fibra de vidrio y madera, diseñadas y homologadas según la normativa europea, capaces de satisfacer tanto a autónomos exigentes como a grandes empresas nacionales e internacionales.
