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Dos categorías de escaleras: uso profesional y no profesional

A la hora de comprar escaleras de aluminio tenemos que pensar si les vamos a dar un uso profesional o no profesional, es decir, doméstico. En este nuevo post del blog vamos a ver una serie de cuestiones en las que fijarnos en cada caso.

Las escaleras de uso doméstico suelen estar en cualquier casa para, por ejemplo, cambiar una bombilla, colgar un cuadro o descolgar las cortinas. Para elegirla tenemos que fijarnos en cuestiones como la altura máxima de uso, la carga máxima que admite o la inclinación máxima recomendada. Lo que ha de primar es, como no, la seguridad. Las escaleras tienen que garantizar la estabilidad mientras realizamos tareas en altura.

Aspectos a tener presentes:

  • Elegir modelos con protecciones antideslizantes en los peldaños, en la plataforma y en las patas. Para trabajar con más comodidad y rapidez.
  • Asegurarse de que la escalera está en buen estado, sin fisuras y con las patas estables. Sin superar el peso que puede soportar.

Más cosas a tener en cuenta 

Los criterios de elección son la altura a alcanzar, el tipo de uso y el espacio que ocupará la escalera. Y es recomendable saber que las partes de la escalera son: plataforma o base estabilizante, barandilla o quitamiedos, larguero, escalones, travesaños, cable tensor y conteras.

Hay que utilizar una escalera que soporte el peso de la persona sumado al de las herramientas a utilizar. El peso máximo viene en la etiqueta. Todas las escaleras de Escaleras Arizona cumplen con la normativa europea UNE-EN 131. Esta certifica las características de seguridad que debe tener. Por ejemplo:

  • Los escalones deben de tener una profundidad mínima de 8 cm y deben de mantener la posición horizontal. En algunos modelos se llega a los 12 cm.
  • La distancia mínima entre escalones tiene que ser de 23 cm y la máxima de 30 cm.

Para elegir escaleras de uso doméstico tienen que cumplirse los siguientes requisitos:

  • Que lleven base antideslizante.
  • Que haya barandilla que ofrezca mayor seguridad, una sujeción más segura.
  • Que la plataforma tenga una base antideslizante no inferior a 25 cm x 25 cm.
  • Que las conteras (remates de las patas) estén perfectamente ajustadas y en buen estado.
  • Que el travesaño y el cable tensor estén en buen estado.

Debes elegir la escalera en función del uso que le vayas a dar:

  1. Doméstico: para trabajos de bricolaje o para colocar elementos decorativos. En este caso los peldaños suelen estar remachados.
  2. Profesional: suelen ser de materiales más robustos. Los peldaños suelen estar embutidos para garantizar un mayor refuerzo en la unión, para que resulte mucho más difícil romperse.

También hay que elegir el número de escalones según la altura a alcanzar. En cuanto a los complementos, hay algunas escaleras que disponen de una bandeja para dejar las herramientas. Hablamos también de los materiales. Las escaleras de uso doméstico suelen ser de aluminio y, por lo tanto, más ligeras y fáciles de transportar hasta la estancia donde se necesiten.

Existen escaleras aisladas, es decir, que no tienen conductividad. Están concebidas para trabajos en contacto con la red eléctrica. Fabricadas en madera o en fibra de vidrio, son también ligeras.

Precauciones al usar una escalera doméstica

  • Posición adecuada: la escalera debe de estar totalmente abierta, las cuatro patas apoyadas en una superficie plana. El ángulo con el suelo debe ser de 75º.
  • Usar el bloqueo de seguridad.
  • Subir y bajar agarrado a los escalones y no a los largueros.
  • Si la altura excede más de 3,5 m de altura, usar arnés de seguridad.
  • Eliminar cualquier rastro de suciedad que pueda ocultar problemas de estructura.
  • Utilizar el calzado adecuado.
  • No mover la escalera mientras se está en ella.